César Pérez-Chirinos, en el “Ágora FIFED”: “Necesitamos un marco legislativo radicalmente nuevo”

 

Sumamos conocimientos e innovación para impulsar el desarrollo económico

 
Pérez-Chirinos, situado el tercero por la derecha, después de la charla.

Pérez-Chirinos, situado el tercero por la derecha, después de la charla.

 

 

El pasado 28 de noviembre, el asesor en Transformación Digital del ministerio de Economía y Empresa César Pérez-Chirinos tuvo su presentación oficial como consejero en el “Ágora FIFED”, esta vez en calidad de presidente del grupo de normas técnicas de blockchain de la Asociación Española de Normalización (UNE). “Hoy vengo con este “gorro” -dijo-, y, además, a contaros una opinión muy personal”.  

El ingeniero de caminos, canales y puertos decidió hablarnos de cómo podría ser la regulación en el mundo digital y lo hizo a través de una presentación titulada “Leyes, normas técnicas y código. ¿Es ley el código informático? El caso blockchain”.

“Necesitamos un marco legislativo radicalmente nuevo. El legislador tiene la tendencia de legislar por analogía, pero estamos en un momento de la historia sin precedentes, en una transición social brutal, que nos obliga a pensar de otra manera”, dijo Pérez-Chirinos, quien en 2010 empezó a interesarse por el código fuente de blockchain “y hoy me sigue resultando fascinante”, reconoció.

El ingeniero parte de la idea de que nuestra vida está regida por multitud de programas de ordenador, por un software que cada vez tiene una peor calidad y un nivel de incertidumbre mayor. “La normalización técnica, la estandarización, es el último peldaño y llega cuando algo ya existe o tiene una cierta estabilidad. Pero con blockchain, el software puede cambiar de la noche a la mañana: ¿cómo hacer, entonces, una norma técnica estable? Y, por otra parte, ¿es un espejismo la autorregulación?”, se pregunta este profesional, cuya carrera ha estado siempre ligada a la innovación.

“Antes se era más consciente de la fragilidad del hardware y el software y se establecían técnicas defensivas”, explicó quien ha recibido la medalla al Mérito Profesional por sus aportaciones a la resiliencia organizacional en el Banco de España y el Banco Central Europeo. “Pero la modificación del software ha resultado ser muy costosa y arriesgada ¡y eso es un problemón!”, contó en un capítulo de su presentación titulado “La insoportable irresponsabilidad legal del software”.

Pérez-Chirinos defiende el dominio público del algoritmo: “Yo prohibiría el software privado”, aseguró, “pero si es propiedad de todos, ¿quién asume la responsabilidad?” Según ese planteamiento, y siguiendo con sus reflexiones metafóricas, el también cofundador y presidente de Honor de Continuam, el instituto de continuidad de negocio, alcanzaba a ver la necesidad de la creación de una agencia de las Naciones Unidas que lleve un control de la autoría, como pasó con la energía atómica después de la Segunda Guerra Mundial. 

Esa abstracción a futuro, que irremediablemente nos coloca en el guion de una historia de ciencia ficción, le lleva a reconocer, además, la importancia de introducir a la persona digital en el derecho internacional, “aun siendo consciente de que no parece algo viable”.

Para el miembro del Consejo Profesional de FIFED, si no fuera universal, la legislación de la vida digital no resultaría útil en la práctica. “Yo veo el mundo digital como un videojuego, en el que las personas seremos avatares anónimos y será difícil mantener los derechos del mundo real. A cambio de unos beneficios, tendremos que renunciar a los derechos que conocemos”.

Ante tales predicciones, el público del “Ágora” se mostraba ansioso por conocer alguna respuesta. Pero César Pérez-Chirinos, haciendo gala de la humildad y el sentido del humor que lo caracterizan, se limitaba a decir: “Yo tan solo planteo el problema, no tengo ninguna solución”.